miércoles, 10 de noviembre de 2004

Alien Vs. Depredador

Agosto 19, 2004
por Seth Shostak
Astrónomo Senior


¿Qué hay realmente allí afuera?


Al estar parado en la fila de boletos para ver Alien contra el Depredador, asumí que esta película sería una versión corregida y aumentada de un video juego, un pequeño entretenimiento casero cargado de esteroides de Hollywood para llenar la pantalla grande. Desde luego, no pude menos que notar que la fila se extendió sobre tres condados, y la película había arrebatado un alto rango de taquilla en su primer fin de semana. Los hechos son que Alien contra el Depredador es no solo algo sin sentido, y una película mejor de lo esperado para la gente arriba de treinta.

Entiendan bien esto: la película es un trabajo de cortar y pegar. Es un plagio de una media docena de situaciones de las bien conocidas películas de ciencia ficción, un edredón cosido de retazos probados y ciertos de tela de película.

La trama (no se preocupe, no se extiende más allá del intermedio de la película) marcha rápidamente, mientras un satélite de vigilancia orbitante encuentra un objeto raro enterrado a miles de metros bajo la Antártida (imagínese La Cosa). Después, un acaudalado industrial con una enfermedad terminal, Charles Bishop Weyland, decide contratar algunos expertos para descubrir que es ese edificio escondido, más que nada para inyectar algo de emoción de último minuto en su declinante vida (piense en Contacto).

Entonces, está el montaje obligado mientras el “equipo” – una mezcolanza de académicos renuentes e irónicos – se integra. La líder del equipo Alexa Woods (interpretada por Sanaa Lathan), está ocupada escalando un precipicio en los Himalaya que están ligeramente más escarpados que el Monumento a Washington, cuando ella toma la llamada a la acción (piense en Kirk en Viaje a las Estrellas IV). La construcción bajo el hielo encontrada por satélite data de la alborada de la humanidad, y está edificada en un revoltijo estilo Ziggurat que incorpora los elementos más grandiosos de los Egipcios, Aztecas, y otros de nuestro pasado arqueológico quienes vivieron principalmente sobre piedra (piense en Indiana Jones, entre docenas).

Todo esto es solo para establecer la escena para la verdadera razón de ser de la película: la batalla entre dos especies de ciencia ficción clásica que son atracción de taquilla por derecho propio: Alien y el Depredador. Hordas recientemente empolladas del primero y un escuadrón bien armado del último engranan en una profunda cacería ritual bajo tierra, mientras el equipo de Weyland sirve alternativamente como víctima accidental de gestación (para los Aliens), y combatiente ocasional. En efecto, es Godzilla contra el Monstruo Zero y las fuerzas de defensa de Tokio.

Violencia sin sentido, les oigo pensar. Si, seguro. Esto es en realidad un libro de historietas, un juego de video y el equivalente extraterrestre de un combate mano a mano de fuerza, ingenio y armas cargadas por medio de resortes. Y aunque la primera parte de la película, en la cual los humanos avanzan hacia las regiones inferiores de la Tierra para explorar y descubrir, es en cambio más interesante que la hipotética brutalidad que sigue, usted debe admitir que no todos los días observa una cría de forma de vida no basada en el carbono (los Aliens) haciendo un sincero esfuerzo para comerse a un grupo de armatostes gruñidores de otro mundo (los Depredadores). Esto tiene la fascinación de la hora del almuerzo en la jaula del Gran Felino.

Qué hay realmente allí afuera

Desde luego, películas como ésta sugieren que la Galaxia está poblada mayormente por especies altamente agresivas, unas cuyo interés en la Tierra tal vez no se extienda más allá que usarla una y otra vez como casa de campo para cacería. Las zonas del espacio en este punto de vista, se comparan a los desconocidos mares en los mapas medievales – “aquí están monstruos” – inmensos habitats prohibidos que rodean las orillas del mundo civilizado, y están atestados de criaturas peligrosas.

Eso es probablemente poco típico. Desde luego, aún no podemos decir como son realmente los extraterrestres, pero la ciencia puede proporcionar alguna comprensión útil. Después de todo, cualquier biología allí afuera existirá en un paisaje de recursos limitados. La competición Darwiniana será su destino, así como el nuestro. Así que podemos contar con que habrá depredadores. La depredación es un dispositivo económico: los carnívoros la dejan a las plantas o a los que comen plantas para acumular lentamente moléculas ricas en energía de la luz del sol o de alguna otra fuente. Entonces rápidamente recogen esta cosecha de compuestos útiles, una táctica que puede impulsar un estilo de vida activo.

Pero por supuesto, para una especie inteligente con tecnología capaz de viajes interestelares, la depredación es algo de la Edad de Piedra. Incluso hoy en día, los seres humanos (quienes están lejos de poder hacer viajes deportivos a otros sistemas estelares) no se basan mucho en la depredación. Cultivamos nuestro alimento y pronto lo fabricaremos. Matar solo por diversión, como lo hacen los Depredadores, ya no se considera socialmente aceptable en la mayoría de los círculos. Los verdaderos Depredadores, quienes deben estar muchos miles de años delante de nosotros, presumiblemente han transitado más allá de esto.

Tan improbable como el Depredador puede ser, aún dejando a un lado su estrafalaria apariencia antropomórfica – un Samurai de acero peinado con rastas – es aún más creíble que el Alien. Este terrorífico colmilludo, con su sangre de ácido nítrico (ruegue para que no tenga una hemorragia nasal en el coche), depende de los seres humanos para procrear. Ahora seguramente, hay algunas especies terrestres, tales como la avispa icneumón que usa otras criaturas como parte de su ciclo reproductivo. ¡Pero por lo menos esas otras criaturas están dando vueltas en el mismo planeta! ¡Imagine las dificultades evolutivas para algunas especies que requieran un encuentro oportuno con seres de otro mundo solo para tener crías! Ese no es un victorioso panorama de supervivencia.

Está bien, es solo una película. Y de hecho, es esto: una que reproduce bien nuestro miedo innato de dientes grandes y excesiva mucosidad. Casi no dice tanto sobre la vida extraterrestre como sobre nuestros miedos más oscuros. Pero Alien Vs. Depredador está hecha con tal estilo y atención en los detalles que se eleva sobre ser solo un combate de lucha de pago-por-evento entre combatientes feos. No tiene mucho sentido, pero tampoco está como para descartarla. Es una película que disfrutarán y en la que pensarán al día siguiente.

Fuente: Instituto SETI

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

Nuestros Hermanos Inteligentes

Octubre 29, 2004

por Seth Shostak
Astrónomo Senior



¿Existe realmente vida allí afuera? ¿Estuvo un Marte más benévolo y húmedo dotado alguna vez por un florecimiento bacterial cuyos descendientes esperan ahora nuestro descubrimiento? ¿Los microbios extraterrestres no vistos nadan en los océanos enterrados de Europa, Calisto o Ganímedes? ¿Que hay de los lagos de metano bajo cero de Titán?

Aún no sabemos si cualquiera de estos mundos cercanos alojan cosas vivas. Pero el dinero listo apuesta que hay incontables paisajes extraterrestres, alrededor de nuestra estrella y de otras, donde las condiciones no solo están maduras para la vida, sino que la biología ha salido adelante.

En otras palabras, se calcula que las probabilidades para la vida extraterrestre son buenas.

Pero cuando llega a la vida inteligente – vida que podría inventar ciencia y tecnología --- los corredores titubean. Después de todo, el camino al Homo sapiens fue sinuoso. Hubo innumerables bifurcaciones en el camino evolutivo, y no pocos biólogos han sugerido que si la historia de este planeta hubiera sido tan solo un poco distinta, los seres humanos nunca habrían hecho la escena. Ellos dicen que la inteligencia fue un accidente altamente improbable.

El único modo de refutar ampliamente esta noción más bien conservadora sería encontrar inteligencia en algún otro sitio. Eso es lo que SETI trata de hacer.

Pero hay otra línea de investigación que podría darnos entendimientos importantes: podríamos investigar cómo las especies llegan a ser inteligentes. Si el proceso que conduce a las especies a un coeficiente de inteligencia más alto depende de la casualidad o un evento fortuito, pudiéramos deducir que el raciocinio es un talento raro. Si no, entonces confiadamente podemos contar con abundantes hermanos galácticos sofisticados.

Lamentablemente, aún no sabemos cómo surgió nuestra propia inteligencia. ¿Qué picó a nuestros ancestros para evolucionar de simples simios a criaturas pensantes? Una teoría dice que todo fue una consecuencia de la conducta de apareamiento que eligieron por conveniencia reproductiva, pero existen otras posibilidades.



Imagen: http://otn.uoregon.edu/.


Sabemos tan poco sobre nuestra propia historia intelectual, incluso sabemos menos sobre otras especies claramente inteligentes, como los delfines.

Corrección: cambie eso a tiempo pasado. Algunas investigaciones recién publicadas por la bióloga conductista Lori Marino (de la Universidad Emory y del Instituto SETI), junto a sus colegas Dan McShea y Mark D. Uhen, por vez primera, ha trazado la inteligencia de ballenas dentadas y delfines en los últimos 50 millones de años. Este mapa puede conducirnos a un verdadero tesoro de investigación: descubrir que es lo que motiva a la evolución seleccionar la inteligencia elevada.

¿Cómo pudieron Marino y su equipo medir el coeficiente intelectual de animales que respiraron durante los últimos millones de años? Ella utilizó lo que se ha convertido en un estándar aceptado para calibrar la inteligencia de animales vivos o muertos: el así llamado “cociente de encefalización” o EQ. Aplicado simplemente, es la masa del cerebro, como una fracción del peso corporal. Si usted tiene un cerebro tamaño promedio para su peso corporal, entonces su EQ es uno. Si usted tiene un cerebro el doble de masivo que el promedio de las especies de su tamaño, entonces su EQ es dos – y usted se mueve, si no a la cabeza de la clase, al menos algunas filas adelante.

Los pumas, por ejemplo, cuyo peso corporal es comparable al suyo, tienen un EQ de uno. Los humanos tenemos un EQ de siete, lo cual significa que su cerebro es casi siete veces más grande que los de esos grandes gatos (lo cual causa que invariablemente usted los derrote en el juego de palabras Scrabble).

El equipo de Marino pasó cuatro años frecuentando las polvorientas colecciones de los museos, rastreando los cráneos fósiles de ballenas dentadas y delfines. Entonces determinaron el volumen de sus cerebros con la ayuda de la tomografía computarizada. El peso de los animales fue estimado al medir el tamaño de algunos de los huesos donde la médula espinal entra al cráneo, un parámetro conocido por estar fuertemente relacionado con la masa corporal. Con la información a la mano, calcularon entonces el EQ de más de 200 especimenes, que representan 37 familias y 62 especies.

¿Que encontraron? Para empezar, los cetáceos tuvieron un gran salto en EQ hace cerca de 35 millones de años, cuadruplicando su EQ de 0.5 a 2.1. Se ignora el motivo de este cambio cerebral, pero una posibilidad es que fue la consecuencia de desarrollar la ecolocación – “ver” su medio ambiente articulando chirridos de alta tonalidad y analizando los sonidos reflejados.

Sin embargo, en los últimos 35 millones de años, estas criaturas han generado descendientes con un amplio rango de EQs, algunos bastante regulares con EQ aproximado a 1.0, y otros con EQ de 4 y 5, algo cercano al nuestro. De hecho, como comenta Marino, “Los cetáceos más inteligentes no están muy lejos de nosotros; ellos pueden hacer muchas cosas que solo los seres humanos y los grandes monos pueden hacer. Tal vez sean un buen ejemplo de una compleja pero mayormente no tecnológica inteligencia”.

¿Qué demuestra eso? No estamos cercanamente relacionados a los delfines en un sentido evolutivo. Pero a pesar de eso desarrollaron una inteligencia comparable a la nuestra. Eso sugiere que hay un verdadero valor de supervivencia en la inteligencia, y que hay muchas formas en que la naturaleza puede producirla.

“Tenemos aquí cuatro o cinco diferentes grupos de animales que, desde un punto de vista evolutivo, son muy distintos”, dice Marino. “Pero existe claramente un efecto de selección de un orden más alto que ha creado similitudes en función. Esto pudiera ser la consecuencia de cierto aspecto de interacción social”.

“Tenga presente”, puntualiza Marino, “que los cerebros no crecen con el tiempo. Debería tener una muy buena razón para poseer un cerebro grande, ya que son metabólicamente muy costosos. Usted tendrá el cerebro que necesita, no más.”

Pero para aquellas criaturas que habitan un nicho ecológico donde la inteligencia vale la pena, suena como si pudiera alcanzarse un alto coeficiente intelectual mediante varios caminos. “Los cetáceos y los primates no están cercanamente relacionados, pero ambos tienen aptitudes de comportamiento similares y cerebros grandes – los más grandes sobre el planeta. La integración cognitiva parece ser el punto fundamental.”

¿Que hay acerca de la posibilidad de inteligencia extraterrestre? Marino comenta filosófica: “Creo que esta investigación es una pieza del rompecabezas, aunque aún tenemos un largo camino por recorrer”.

“Esto nos dice algo acerca del cómo se desarrolló la inteligencia en este planeta, mientras más aprendamos de eso, mejor podemos estimar la probabilidad de que se desarrolle en alguna otra parte. Además nos da una mejor comprensión de cual es el rango de posibilidades”.

Los seres humanos no somos el único juego inteligente en la población. Y esa afirmación puede extenderse al cosmos.


Fuente: Instituto SETI

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

martes, 9 de noviembre de 2004

La Vida, El Universo y El Todo

Cómo trata la Astronomía las Grandes Interrogantes

Octubre 22, 2004

por Seth Shostak
Astrónomo Senior


Existen algunas interrogantes que han coagulado los cerebros de los homínidos desde que desarrollaron la capacidad de discernir. Preguntas como: “¿cuál es la naturaleza del mal?” ó “¿qué causó la explosión Cambriana?” sin mencionar la famosa duda de Freud: “¿qué desea una mujer?”.

Sin embargo, no hay duda de que la gran pregunta más planteada universalmente es: “¿de qué se trata todo esto?” “¿Cuál es el propósito de nuestra existencia? donde “nuestra” se refiere no solo a la de Ud. incluyendo sus familiares y amigos, sino también a la de la Tierra, las estrellas, y al total de materia cósmica”.

Por salud mental, la mayor parte del tiempo usted deslizará esta pregunta hasta el oscuro sótano de su mente. Después de todo, usted tiene compromisos por cumplir y plazos por alcanzar. No muchos de nosotros pueden darse el lujo, ni soportar la frustración de preguntarse constantemente: “¿cuál es el propósito?”. Es más fácil delegar esa pregunta a los teólogos o a los filósofos quienes se supone cobran un sueldo por pensar en tales cuestiones.

¿Nos ayudará la Astronomía a encontrar el sentido de todo esto?. Bien, de hecho no puede resolver la interrogante, pero puede proporcionar un contexto, tal como los mares circundantes dan el contexto a la historia de la Gran Bretaña.

¿Que tanto dice la astronomía? Tan reciente como en los albores del siglo veinte, la mayoría de la gente creía que el universo había estado allí por siempre y para siempre. Éramos solo un pedazo de restos de naufragio cósmico, a la deriva en un río sin fin. Luego, hace solo una vida, Edwin Hubble demostró que el universo se expande – diluyéndose a una velocidad que cada año agrega 32 mil millones de kilómetros de distancia entre su autopista y el cercano Cúmulo de Virgo. Por cierto, como han de saber la mayoría de los lectores, las recientes mediciones astronómicas muestran que este ensanchamiento cósmico está acelerando.

Pero eso no importa. El punto importante es que un universo que se expande, por fuerza, debe haber tenido un principio, un comienzo. Desde luego, esto tiene una agradable consonancia con la mayoría de las religiones, lo cual explica el porqué Hubble recibió menos acaloramiento para su descubrimiento que Copérnico o Galileo.

Sin embargo, la sorpresa es lo que sucede después. Nuestro Sol, un recién llegado a la Galaxia, al igual que su tío menos favorito, será divertido al envejecer. En otros cinco mil millones de años, más o menos, se hinchará, tragará algunos planetas internos y hervirá hasta consumir todo lo interesante en nuestro mundo. Nuestros descendientes (suponiendo que tengamos algunos) se reubicarán a un mejor vecindario – trayendo consigo fotografías y artefactos para las futuras exhibiciones de museo: “La Tierra: el Planeta que Era”.

Podrán hacer esto algunas veces antes de huir del vapor. Después de todo, la mayoría de las estrellas son más antiguas que el Sol, y el auge de población estelar definitivamente ha terminado. Las estrellas se están apagando. En aproximadamente 100 mil millones de años, los alguna vez brillantes brazos de la Galaxia serán acribillados con escorias de carbono del tamaño del Sol, agujeros negros, e inactivas estrellas neutrón – algún ciento de miles de millones de silenciosos armatostes estelares.

Se acabará la diversión, y comenzará el deterioro. Los choques caóticos eventualmente despojarán a los planetas de los cadáveres de sus anteriores soles, y las galaxias se evaporarán lentamente -- arrojando sus contenidos oscuros y sin vida en el siempre expandiente vacío. Incluso los masivos agujeros negros desaparecerán algún día, adicionando sus masas a la inerte y aguda niebla fría en la que se convertirá el universo.

El cosmos será un cementerio de un silencio sepulcral, disfrazado de noche perpetua.

En la medida de lo mejor que podamos deducir, este sombrío panorama continuará interminablemente. No habrá revés, ni un Big Crunch para comenzar el ciclo de nuevo. El cosmos – oscuro, tedioso e inactivo – simplemente continuará en expansión y dilución.

Así que aquí tenemos el gran cuadro: el universo comienza con una emisión de actividad de 100 mil millones de años y entonces colapsa en una parálisis sin fin. Todos nuestros trabajos – toda la poesía, la ciencia, la delicadeza, y todo el rock and roll – se aquitarán y perderán. La muerte del universo no es solo por mucho tiempo, es eterna. El corto y brillante arranque al principio donde nos encontramos ahora no es solo insignificantemente breve en la historia del cosmos, es infinitamente pequeño.

Hay un fugaz aliento, un brinco rápido, y luego una línea de la nada que se expande a través de la habitación, sale por la puerta y toma la calle para siempre.

Dada nuestra aparente escasez de importancia, y el hecho de que no habrá legado en este universo, es tentador escoger vivir solo el momento (como su gato). Tal vez es inútil y no más que una tentación a la locura el pensar acerca del porqué estamos aquí. Por otra parte, quizás un día aprenderemos algo que cambiará este desolado cuadro, ya sea a golpe de nuestros propios esfuerzos, o posiblemente mediante sabiduría enviada a nosotros por otros seres cósmicos aún no descubiertos.

Freud dijo: “la anatomía es el destino”. Su tema eran las mujeres, pero pudo haber sido el universo.

Fuente: Instituto SETI

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

martes, 5 de octubre de 2004

¿Somos los residentes más jóvenes en la Galaxia?

Septiembre 30, 2004

por Seth Shostak

No lo sabemos, pero puede haber miles, y posiblemente millones, de planetas como la Tierra salpicando las latitudes oscuras de la Vía Láctea. Nuestra Galaxia pudiera estar poblada con mundos que no solo alberguen vida, sino también inteligencia. En este supuesto club de inteligentes, ¿es posible que seamos los recién llegados?

Esta pregunta puede ser contestada trivialmente.

Aunque el Homo Sapiens ha estado recorriendo el planeta durante algunos cientos de miles de años, nuestra capacidad técnica para construir cohetes y radios es de solo un siglo. Cualquiera que haya aprobado ciencia de séptimo grado sabe que eso no es mucho tiempo comparado con la edad de la Tierra.

Probablemente, de niño, a usted le motivaron para hacer una tira de papel con un gráfico de la historia de nuestro planeta desde su formación hace 4,600 millones de años, hasta la aparición de las bacterias, trilobites, dinosaurios y humanos. Si el gráfico recorrió las paredes desde la parte de atrás del salón de clases hasta el pizarrón del frente, la representación del tiempo desde el invento del radio fue de solo una centésima del ancho de un cabello.

Si la cinta comenzó con la formación de la Galaxia, hace 13 mil millones de años, la era de la capacidad tecnológica sería aún más delgada.

Así que seguramente estamos entre los recientes miembros en la fraternidad, si es que la membresía del club exige tecnología de radio o algo superior. Eso significa que si captamos una señal de extraterrestres, se puede confiar satisfactoriamente en que esos emisores están más allá de nuestro propio nivel.

Pero hay otras cuestiones de relevancia: ¿cuántos miembros del club existen y cuánto más avanzados serían?

Si queremos calcular cuántos mundos contemporáneos tienen habitantes técnicamente sofisticados, podemos comenzar con la Ecuación de Drake. Esta fórmula legendaria calcula el número de sociedades galácticas de alta tecnología como el producto del índice en el que surgen multiplicado por su promedio de vida. Esto es como calcular cuántos estudiantes hay en el campus de la universidad local al multiplicar el número de nuevas admisiones por la duración promedio de la permanencia en la universidad (de casi cuatro años).

No sabemos mucho acerca del promedio de vida de las sociedades tecnológicas, fuera del hecho de que hasta ahora, la nuestra se las ha ingeniado para sobrevivir durante un siglo. Tampoco sabemos con que frecuencia brotan en la Galaxia las sociedades inteligentes. Pero sabemos que este índice está sin duda ligado a la frecuencia con la que nacen las estrellas. Evidentemente, un mayor flujo de estrellas nuevas producirá a fin de cuentas un mayor número de planetas con seres pensantes.

¿Cuál es la frecuencia de formación de estrellas? Bien, existen aproximadamente 200 mil millones de estrellas en la Vía Láctea, y eso significa que el índice promedio en los últimos 13 mil millones de años ha sido de 15 estrellas nuevas por año. No obstante, este índice promedio es un poco engañoso. Cualquiera que haya usado un radiotelescopio para estudiar galaxias sabe que cuando se examina una gran espiral como la Vía Láctea, se descubre que la cantidad total de gas interestelar es típicamente un mínimo porcentaje de la masa de todas las estrellas. Puesto que el gas interestelar es la materia con que están construidas las estrellas, es obvio que hay poco material hoy día para construir nuevas.

Cierto, las estrellas explotan al morir, devolviendo al espacio algo de su contenido. Incluso el Sol exhalará algo de vapor al dirigirse al cementerio estelar. Pero la gran mayoría de lo que hay dentro del Sol permanecerá allí para siempre, atrapada por la gravedad. Los ingredientes para las nuevas estrellas son escasos, y la mayoría de las estrellas que haría nuestra Galaxia.... ya se han hecho.

Mary Barsony, científica de investigación en el Instituto de Ciencia Espacial, comenta que “en estos días, el índice de nacimiento estelar en la Vía Láctea es de solo una masa solar por año. La Galaxia ya no es tan fértil como alguna vez lo fue. Aunque parece que hubo un verdadero despliegue de formación estelar hace más de 10 mil millones de años. Fue en esos primeros años cuando prosperó la población estelar”.

En otras palabras, nuestro Sol es de los que se desarrollaron después.

Evidentemente, esto debe afectar la lista de nuestro club de seres inteligentes. Pero, ¿cómo? Hay dos posibilidades obvias. Una es que la inteligencia es un atributo tan conveniente que las sociedades tecnológicas duran muchísimo tiempo – miles de millones de años. Los trilobites duraron 500 millones de años y ni siquiera eran inteligentes (por cualquier estándar razonable). Así que tal vez el club de seres pensantes es el hogar para sociedades realmente antiguas, y seamos como preescolares rodeados de estudiantes graduados.

La otra posibilidad es que no, la tecnología no sobrevive por intervalos de tiempo tan largos. Y a pesar de que la Galaxia pudo haber creado grandes civilizaciones en el pasado profundo y distante, la mayoría de ellas no existen. En este panorama, los otros miembros del club no son tan antiguos, pero son escasos.

Solo cuando hayamos decodificado una señal exterior tendremos claro si alguna y cual de estas posibilidades es cierta. Pero el hecho con el que comenzamos nuestra discusión permanece simplemente así: un hecho incuestionable. Somos los recién llegados a la escena tecnológica. Nuestras vanaglorias y preocupaciones en el escenario galáctico apenas han comenzado.

Fuente: Instituto SETI

Traductor: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

sábado, 11 de septiembre de 2004

¿Ha Encontrado SETI@home una Señal?

Septiembre 2, 2004

por Seth Shostak




Un reciente artículo (de 01 de Septiembre) en la revista New Scientist, titulado “Señales Misteriosas desde 1000 Años Luz”, implica que el proyecto SETI@home de UC Berkeley ha descubierto una muy convincente señal candidata que puede ser la primera evidencia fuerte de inteligencia extraterrestre.

¡Qué pena! esta historia es falsa. Según Dan Werthimer, líder del proyecto SERENDIP SETI en UC Berkeley, este es un caso de un reportero que no entiende como funciona la búsqueda. Dice que las malas interpretaciones y las declaraciones tomadas fuera de contexto dan la impresión de que su equipo está excepcionalmente impresionado con una de las muchas señales candidatas, la SHGb02+14ª, descubierta usando el popular software de SETI@home. Bien, no lo están.

Esta señal ha sido encontrada dos veces por los amigos que usan un el protector de pantalla que han descargado. El hecho redundó en que el equipo de UC Berkeley la pusiera en su lista de “mejores candidatas”. Recuerde que el programa SETI@home produce 15 millones de informes de señal cada día. ¿Cómo puede uno clasificar quizás a través de esta enorme inundación de información para buscar señales que pueden ser realmente extraterrestres y no de simples ruidos de artefactos o interferencia artificial?

El esquema usado es simple en principio (sin embargo los detalles técnicos son complejos): la información de SETI@home viene de un receptor sobre el radio telescopio de Arecibo que está incesantemente filtrando el cielo, “encaramado” sobre otras observaciones astronómicas. Cada pocos segundos, examina otra trayectoria de la inmobiliaria celeste y graba la información cubriendo muchos millones de canales de frecuencia. Algunos de estos datos son entonces distribuidos para su procesamiento mediante el protector de pantalla. Por si acaso, el telescopio examinará la misma trayectoria en el cielo más o menos cada seis meses. Si una señal es persistente – es decir, si se muestra más de una vez cuando el telescopio está apuntando al mismo lugar, y a la misma frecuencia (después de la corrección de los cambios causados por el movimiento de la Tierra) – entones se convierte en candidata. Desde luego, el que sea persistente no significa que el origen está encendido siempre, solo significa que se encontró muchas veces.

En Febrero de este año, Werthimer y sus colegas llevaron una lista de doscientas de las mejores señales candidatas de SETI@home y apuntaron deliberadamente esa descomunal antena en las direcciones en las que el campo de acción fue apuntado cuando fueron encontradas. Una vez sujetas a esta inspección cercana, todas las señales fallaron en salir al descubierto, menos una. Eso las descalifica de ser aclamadas como detecciones verdaderas de una señal persistente. La única que fue encontrada nuevamente, la SHGb02+14a (tema del artículo en New Scientist), aún será sin duda observada de nuevo, pero según Paul Horowitz, quien encabeza los logros de Harvard SETI, las estadísticas del ruido hacen bastante probable que reapareciera al menos una de las candidatas observadas en Febrero, incluso si todas esas señales se debieran simplemente a las fluctuaciones del receptor.

El artículo remarca la tendencia fuerte de esta señal, la que describe como un enigma. Desde luego, muchas fuentes terrestres de interferencia, y en particular los satélites de telecomunicación, muestran tendencias fuertes debido a los cambiantes efectos Doppler mientras orbitan el cielo. (Dicho sea de paso, inclinado técnicamente desearía hacer notar que la tendencia causada por un planeta orbitando como la Tierra sería de 0.15 Hz/seg, no de 1.5 Hz/seg como se mencionó en la revista). Mientras que para la distancia de 1000 años luz afirmada en el título del artículo, no hay evidencia clara que apoye este número, excepto la carencia de estrellas cercanas conocidas en el haz de la antena.

La conclusión es que un experimento como SETI@home siempre tiene una lista de candidatas, un cuadro de aquellas señales que lucen más prometedoras. De hecho, se puede encontrar las versiones actuales de esta lista en su sitio de internet. Sin embargo, hay una gran diferencia entre una señal candidata y una convincente. Si alguno de los grandes experimentos SETI ejecutados por el Instituto SETI, por el grupo UC Berkeley, los amigos en Harvard, o los Australianos o los Italianos, descubre una señal que ellos piensen que es de origen extraterrestre, inmediatamente tomarán medidas para confirmar esto, ya sea con sus propios científicos o con otros observadores de otras organizaciones. Se podrá encontrar la información al respecto en sus sitios de internet, y en múltiples medios de comunicación.

Tristemente, el New Scientist, al insinuar que es inminente la detección de una señal extraterrestre, ha trajinado sin saber en un pegajoso tanque de hipérbole.

Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

lunes, 6 de septiembre de 2004

Astrónomos Descubren otros dos Planetas del tamaño de Neptuno

Septiembre 2, 2004

por Doug Vakoch




En un sorprendente seguimiento al anuncio de la semana pasada de que una “super-Tierra” ha sido descubierta alrededor de una estrella cercana, equipos adicionales de astrónomos han anunciado que otros dos planetas de tamaño similar han sido detectados. De los más recientes descubrimientos, uno circunda a una estrella semejante al sol, mientras que el otro orbita a una estrella enana roja. Ambos planetas recientemente anunciados son notablemente más chicos que la inmensa mayoría de otros planetas extrasolares detectados hasta ahora, siendo casi veinte veces la masa de la Tierra – comparable al tamaño de Neptuno. “Este descubrimiento demuestra que, como esperábamos, nuestra galaxia es rica en planetas como la Tierra”, explica el astrónomo Frank Drake, Director del Centro para el Estudio de la Vida en el Universo del Instituto SETI.

“Si observa a los más o menos 135 planetas extrasolares descubiertos hasta ahora, es claro que la naturaleza hace más de los planetas más pequeños que de los más grandes” dice Geoff Marcy de la Universidad de California en Berkeley, líder del equipo que descubrió un planeta alrededor de la estrella enana roja Gliese 436, localizada a 33 años luz de la Tierra. “Hemos encontrado más planetas del tamaño de Saturno que planetas del tamaño de Júpiter, y al parecer ahora hay más planetas del tamaño de Neptuno que los del tamaño de Saturno. Eso significa que hay una oportunidad de encontrar Tierras, y quizás más de ellas que todos los otros planetas que hemos descubierto hasta ahora”.

“Hace diez años no se sabía de ningún solo planeta que orbitara una estrella tipo solar, excepto aquellos en nuestro sistema solar”, dice Steven J. Dick, Historiador en Jefe de la NASA y autor del recientemente publicado libro El Universo Vivo: la NASA y el Desarrollo de la Astrobiología. “Estos recién descubiertos son aún los más cercanos a la Tierra en tamaño. Es un paso más en la emocionante búsqueda de vida extraterrestre, que es apoyada por la NASA a través de su programa de astrobiología”.

Paul Davies, Profesor de Filosofía Natural en el Centro Australiano para la Astrobiología en la Universidad Macquarie, sugiere que los descubrimientos recientes tienen profundas implicaciones para las teorías de la formación de los planetas. Enfocándose en la manera en que las observaciones recientes desafían nuestro actual entendimiento de los sistemas planetarios, Davies sostiene que “estas últimas observaciones confirman que los planetas grandes que orbitan cerca a su estrella madre son una característica común de los sistemas planetarios. Tal configuración vuela en la cara de la teoría ortodoxa de la formación de los planetas, y busca desencadenar una revolución en nuestro entendimiento del como y donde se forman los planetas”.

¿Otras Tierras?

Pero exactamente ¿Cuán parecidos a la Tierra son estos planetas recién descubiertos? Eso permanece abierto a debate. “Es casi cierto que todos los planetas encontrados hasta ahora son gigantes de gas”, dice Marcy, hablando sobre descubrimientos anteriores de planetas alrededor de otras estrellas. “Pero estos nuevos son un enigma”, continúa. “Podrían ser gaseosos como Júpiter, pero también podrían tener un núcleo de roca congelada y una gruesa cubierta de hidrógeno y gas de helio, como Neptuno. O podrían ser una combinación de roca y hielo, como Mercurio”.

Todos los tres planetas del tamaño de Neptuno recientemente anunciados fueron descubiertos usando el método de “velocidad radial”. Mientras los planetas orbitan sus estrellas, causan unas leves perturbaciones en la estrella con relación a la Tierra. Este leve movimiento rítmico, acercándose y alejándose alternadamente de la Tierra, se muestra como cambios en las emisiones espectrales de las estrellas. Al ver cuánto tiempo pasa antes de que el patrón se repita, los científicos pueden determinar cuánto le toma al planeta completar una órbita completa.





Usando el método de velocidad radial, los astrónomos pueden buscar un planeta alrededor de una estrella al observar los cambios en la luz estelar. Si el planeta circundante es lo bastante grande, los astrónomos pueden detectar cambios en la luz estelar causados por el “jalón” gravitacional del planeta sobre la estrella. Mientras la estrella se mueve hacia la Tierra, la luz estelar es cambiada hacia longitudes de onda azules. Mientras la estrella se aleja de la Tierra, el espectro cambia hacia longitudes de onda rojas.


Todos los tres planetas más recientemente descubiertos orbitan sus estrellas madre en una órbita cercana. Es precisamente la estrechez de estas órbitas lo que hace posible detectar tales planetas usando el método de velocidad radial. A distancias mucho más grandes de sus estrellas, los planetas con la misma masa serían mucho más difíciles de detectar usando este método – y con los límites actuales de la tecnología de observación, quizás incluso se volverían invisibles.

Por ejemplo, el planeta recién descubierto alrededor de la estrella 55 Cancri semejante al Sol realiza una órbita completa en menos de tres días, en comparación al año de 365 días de la Tierra. Este planeta del tamaño de Neptuno circunda su estrella mucho más cerca de lo que la Tierra orbita al Sol. De hecho, circunda la estrella 55 Cancri a una distancia de 5.6 millones de kilómetros (3.5 millones de millas) – menos del 4% de la distancia entre la Tierra y el Sol. El otro planeta recién anunciado – el cual circunda la estrella Gliese 436 a una distancia de 4.2 millones de kilómetros (2.6 millones de millas) – también orbita a una rango relativamente corto, por lo menos al compararlo a los 149 millones de kilómetros (93 millones de millas) que separan a la Tierra del Sol.

Una de las restricciones del método de velocidad radial es que es altamente sensible a la distancia de los planetas de sus estrellas. Los planetas que orbitan sus estrellas madre a una distancia larga causan menos “jalón” gravitacional que los mismos planetas con órbitas más apretadas. De tal manera, para ser detectado con las tecnologías actuales, un planeta debe estar muy grande para ser detectado en una órbita distante alrededor de su estrella. “Podremos fácilmente detectar planetas de solo 10 veces la masa de la Tierra”, dice Marcy, y es optimista con respecto al futuro de la búsqueda de planetas. “Cuento con que encontraremos docenas de planetas de entre 10 y 20 veces la masa de la Tierra en algunos años”.

Pero para encontrar planetas mucho más pequeños, es necesario un método alternativo. Por ejemplo, la Misión Kepler de la NASA es un programa basado en el espacio que buscará planetas del tamaño de la Tierra usando el “método de tránsito”, escudriñando en las estrellas el ligero oscurecimiento que ocurre cuando los planetas cruzan a través de la línea de visión entre su estrella doméstica y el telescopio. El método de tránsito tiene una ventaja crítica sobre el método de velocidad radial: el oscurecimiento de una estrella que ocurre durante un tránsito no es afectado sensiblemente por la distancia entre una estrella y su planeta.

Los descubrimientos recientes dan a Jon Jenkins, ingeniero del Instituto SETI quien trabajó en la Misión Kepler, más razón para estar optimista acerca del descubrimiento de planetas tamaño Tierra. “Todo indica que tenemos una gran diversidad de planetas”, comenta Jenkins, “y esos planetas son muy abundantes”. Al comenzar la Misión Kepler las observaciones desde el espacio a fines del 2007, los científicos tendrán una mejor idea de cuán abundantes son los planetas terrestres.

Alta Precisión

Aunque la sofisticación de las observaciones astronómicas ha aumentado asombrosamente desde que Johannes Kepler anunció sus tres leyes del movimiento celestial a principios del siglo diecisiete, los principios básicos detrás de los descubrimientos astronómicos vanguardistas permanecen bastante iguales. Primero y antes que nada, los principales astrónomos usan los mejores instrumentos de la época. Para Kepler, eso significó recurrir a las más exactas observaciones del astrónomo danés Tyco Brahe, quien le permitió a Kepler trazar la trayectoria elíptica que hace Marte al viajar alrededor del Sol.

Los descubrimientos recientes de planetas extrasolares fueron hechos en algunos de los observatorios de clase mundial de hoy, como el Observatorio McDonald de la Universidad de Texas en Austin, donde fueron hechas muchas de las observaciones a la estrella 55 Cancri. En el Observatorio McDonald, un complejo sistema de programación le permite proceder cada noche a varios proyectos de investigación. Con este método, cualquier proyecto dado de investigación puede obtener información en semanas o incluso meses, mientras los objetivos prometedores para cada proyecto son ingresados en la cola para hacer mejor uso de las vicisitudes del ambiente de observación, tales como cambios en el clima y la fase de la Luna. “En 180 días, conseguimos más de 100 observaciones a la estrella”, explicó la astrónoma Barbara McArthur, quien dirige el equipo del Telescopio Hobby-Eberly (HET) del Observatorio McDonald. “Esto es un acceso asombroso a un instrumento de alta precisión”, explicó. El astrónomo William Cochran, su colega en el Observatorio McDonald agregó: “La combinación de la operación de programación en espera, la cual nos permite obtener la información cuando la necesitamos, y el exquisito espectrógrafo, el cual recopila información extraordinaria, hace al HET excepcionalmente apropiado para esta tarea”.

Como el único sistema de cuatro planetas conocido hasta ahora, en el punto de vista de McArthur el sistema de la estrella 55 Cancri es “el análogo más cercano que tenemos de nuestro sistema solar”. De hecho, la temprana detección de los planetas alrededor de la 55 Cancri fue razón suficiente para ponerlo hasta arriba de la lista de estrellas para ser observadas por el Proyecto Phoenix del Instituto SETI, el cual buscaba la estrella hace varios años. Usando una supercomputadora hecha a la medida y el Observatorio Nacional de Radio Astronomía en Green Bank, West Virginia, la 55 Cancri fue examinada como parte de la más sensitiva búsqueda de inteligencia extraterrestre del mundo. No se encontró ninguna señal de inteligencia.

Sabiduría Poco Convencional

Sin embargo, la enana M Gliese 436, no fue examinada por el Proyecto Phoenix en busca de señales de inteligencia. “Durante décadas”, explica Peter Backus astrónomo del Instituto SETI, “la sabiduría convencional decía que los programas de SETI deberían eludir las estrellas de poca masa tales como la Gliese 436. Estas estrellas están mucho más frías que el Sol, y para que el planeta tenga agua líquida, tendría que orbitar muy cerca a la estrella”.

Pero la proximidad requerida para el agua líquida tiene un precio. Como explica Backus, “Tal proximidad cercana a la estrella causaría mareas en la masa del planeta y bloquearía tanto su rotación que siempre daría un lado a la estrella – justo como la Luna está bloqueada a la Tierra”. Y eso tendría implicaciones al planeta en su totalidad: “Un trabajo anterior sugirió que la atmósfera de tal planeta se congelaría en el lado nocturno”, dice Backus, “dejando el lado del día completamente expuesto a la radiación de la estrella. Para las estrellas M este es un problema particular puesto que algunas muestran llamaradas gigantescas, mucho más grandes que cualquiera producida por nuestro Sol”.

De hecho, Marcy ha estimado que la temperatura en el lado brillante del último planeta descubierto alrededor de Gliese 436 sea de alrededor de los 377° C, mientras que el gélido helado lejano rondaría inconfortablemente cerca al cero absoluto. Pero la zona intermedia, según el punto de vista de Marcy, podría ser más hospitalaria. “El frente está caliente y el lado posterior está probablemente frío”, dijo, “pero la región entre ambos tendría temperaturas moderadas entre los 0 y los 100° C”, los puntos de congelamiento y ebullición del agua.

“Recientemente, mientras hemos aprendido más sobre los planetas en nuestro sistema solar, mejorado el modelado por computadora de las atmósferas, y descubierto vida en ambientes extremos terrestres, la posibilidad de planetas habitables orbitando estrellas M está recibiendo un interés renovado”, dice Backus. “Para explorar ese tema, el Equipo del NAI (Instituto de Astrobiología de la NASA) del Instituto SETI estará alojando una serie de talleres comenzando en el 2005. Cerca de dos docenas de expertos de varias ramas de la astrobiología se reunirán para estudiar la posibilidad de que estas pequeñas estrellas con épocas de vida extremadamente largas, puedan ser anfitriones adecuados para planetas con vida”.

Davies, autor de ¿Estamos solos? Consecuencias Filosóficas del Descubrimiento de Vida Extraterrestre, coincide en que los científicos deberán ser cautelosos acerca de asumir que ya conocen todos los mejores lugares para buscar vida más allá de la Tierra. Los descubrimientos recientes de planetas tamaño Neptuno orbitando cerca de sus estrellas le dan una razón más para estar vigilante. “Las consecuencias de la vida más allá de la Tierra están lejos del alcance”, dice Davies. “Hasta ahora, la especulación sobre esto se ha enfocado en planetas semejantes a la Tierra, pero quizás esto es demasiado regionalista. Dadas las extrañas configuraciones planetarias que se han detectado ahora, podríamos considerar la posibilidad de vida en algunos planetas muy distintos a la Tierra”.


Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

miércoles, 1 de septiembre de 2004

Científicos descubren el Primero de una Nueva Clase de Planetas

Agosto 31, 2004

Los astrónomos anunciaron hoy el primer descubrimiento de una nueva clase de planetas más allá de nuestro sistema solar de 10 a 20 veces el tamaño de la Tierra – mucho más pequeños que cualquiera de los detectados anteriormente. Los planetas constituyen una nueva clase de planetas extrasolares del tamaño de Neptuno.

Esta ilustración artística muestra el planeta extrasolar recién descubierto orbitando la estrella Gliese 436. En este dibujo, el planeta aparece gaseoso como Júpiter, con una atmósfera nebulosa. Los astrónomos no saben realmente si este planeta es gaseoso, o rocoso, como la Tierra y Marte.
Pulse para ver una imagen más amplia Cortesía de la imagen: NASA.
Más imágenes disponibles


“Estos planetas del tamaño de Neptuno demuestran que los del tamaño de Júpiter, los gigantes de gas no son los únicos planetas allí afuera” mencionó el Dr. Geoffrey Marcy, uno de los co-descubridores del planeta. Su compañero, el Dr. Paul Butler, agregó, “Estamos comenzando a observar planetas más y más pequeños. El próximo destino son los planetas como la Tierra”.

Por otra parte, uno de los planetas nuevos se une a otros tres que orbitan la estrella cercana 55 Cancri para formar el primer sistema conocido de cuatro planetas.

Los descubrimientos consisten de dos nuevos planetas. Fueron descubiertos por el mundialmente famoso equipo caza-planetas formado por Butler y Marcy del Instituto Carnegie de Washington y la Universidad de California, en Berkeley, respectivamente; así como Barbara McArthur de la Universidad de Texas, en Austin. Ambos hallazgos fueron revisados por expertos y autorizados para su futura publicación en el Astrophysical Journal. La NASA y la Fundación Nacional de Ciencia (NSF) financiaron la investigación.

Puesto que los planetas nuevos son más pequeños que Júpiter, es posible que estén formados de roca, o de roca y hielo, en lugar de gas. Según los científicos, los planetas, al igual que la Tierra, pueden haberse formado a través de una acumulación gradual de masas rocosas. “Un planeta del tamaño de Neptuno puede no tener suficiente masa para retener gas, pero hasta este punto no lo sabemos”, dijo Butler.


Esta ilustración compara el tamaño de los recién descubiertos planetas más allá de nuestro sistema solar semejantes en tamaño a Neptuno con el tamaño de la Tierra y Júpiter. Los nuevos planetas tienen solo unas 20 veces la masa de la Tierra, o cerca de dos veces el tamaño real o el diámetro – mucho más pequeños que la mayoría de los planetas extrasolares del tamaño de Júpiter encontrados hasta hoy.
Cortesía de la Imagen: NASA/JPL


“La NASA junto con nuestra asociada NSF, está extremadamente orgullosa de este significativo descubrimiento planetario”, mencionó Al Diaz, Administrador Asociado del Directorado de Ciencia de la NASA. “El resultado del estupendo trabajo de los científicos del proyecto es un ejemplo brillante del valor de la exploración espacial”.

Las misiones futuras de la NASA para la búsqueda de planetas, incluyendo la misión Kepler, la Misión de Interferometría Espacial (Space Interferometry Mission) y el Localizador de Planetas Terrestres (Terrestrial Planet Finder), buscarán planetas semejantes a la Tierra. Se han descubierto cerca de 140 planetas extrasolares.

Ambos planetas nuevos están muy pegados a sus estrellas madre, mezclándose entre ellas en cuestión de días. El primer planeta, descubierto por Marcy y Butler, orbita una pequeña estrella llamada Gliese 436 cada dos días y medio a solo una pequeña fracción de la distancia entre la Tierra y el Sol, esto es a unos 4.1 millones de kilómetros (2.6 millones de millas). Este planeta es solo el segundo que se sabe que orbita una enana M, un tipo de estrella de poca masa de cuatro décimas del tamaño de nuestro propio sol. La estrella Gliese 436 está localizada en nuestro patio galáctico, a una distancia de 30 años luz en la constelación Leo.

El segundo planeta, descubierto por McArthur, corre alrededor de la estrella 55 Cancri en solo tres días, también a una fracción de la distancia entre la Tierra y el Sol, aproximadamente a 5.6 millones de kilómetros (3.5 millones de millas). Tres planetas más grandes giran también alrededor de la estrella cada 15, 44 y 4,520 días, respectivamente. Marcy y Butler descubrieron al más lejano de éstos en el 2002. Aún es el único gigante de gas conocido semejante a Júpiter que reside tan lejano a su estrella como nuestro propio Júpiter. La estrella 55 Cancri tiene una edad aproximada de 5 mil millones de años, un poco más luminosa que el sol, y está localizada a una distancia de 41 años luz en la constelación de Cáncer. “La estrella 55 Cancri es un laboratorio importante para el estudio de la formación y evolución del sistema planetario”, señaló McArthur.

En ambos descubrimientos se usó la técnica de “velocidad radial”, en la que el tirón gravitacional de un planeta es detectado por el bamboleo que produce en su estrella madre. Butler, Marcy y colaboradores, incluyendo a la Dra. Deborah Fischer de la Universidad Estatal de San Francisco y el Dr. Steven Vogt de la Universidad de California, en Santa Cruz, descubrieron su “Neptuno” después de la cuidadosa observación de 950 estrellas cercanas mediante el Observatorio W.M.Keck en Mauna Kea, Hawai. Pudieron ubicar un planeta tan relativamente pequeño a causa de que la estrella que tironea es pequeña y más susceptible al bamboleo.

McArthur y los colaboradores Drs. Michael Endl, William Cochran y Fritz Benedict de la Universidad de Texas descubrieron su “Neptuno” después de lograr más de 100 observaciones de la 55 Cancri desde el Telescopio Hobby-Eberly en el Observatorio McDonald al Oeste de Texas. Al combinar esta información con los datos anteriores de Marcy, Fischer y Butler del Observatorio Lick en California, y los datos de los archivos del Telescopio Espacial Hubble de la NASA, el equipo pudo figurar la órbita del planeta externo de la estrella 55 Cancri. Esto, a su vez, les permitió ver claramente las órbitas de los otros tres planetas interiores, incluyendo el nuevo “Neptuno”.

Pulse para obtener más imágenes y animaciones

La información sobre la búsqueda de la NASA de planetas extrasolares está disponible en: http://planetquest.jpl.nasa.gov/

Whitney Clavin
Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA (JPL)

Don Savage
Base de Operaciones de la NASA

Fuente: NAI (Instituto de Astrobiología de la NASA)

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

domingo, 15 de agosto de 2004

Los Correos Electrónicos Ilustran la Fina Línea Entre lo Brillante y lo Extravagante

Agosto 11, 2004

por Seth Shostak - Astrónomo Senior

Puede haber solo algunas docenas de investigadores SETI de jornada completa, pero millones más desean ofrecer alguna ayuda de tiempo parcial. Su interés es comprensible. Después de todo, ¿que podría ser más atrayente para una persona del siglo 21 que la idea de que, a pesar de la ingeniosidad de las decenas de miles de millones de humanos que han deambulado y haraganeado por todo el planeta, él o ella pudiera ser el primero en descubrir extraterrestres en algún mundo remoto? Este interés generalizado en ayudar en la búsqueda se explica indudablemente por la popularidad del protector de pantalla de SETI@home. Y es responsable también de mucho de mi correo electrónico.

A diario recibo pantallas llenas de sugerencias, preguntas y comentarios. La mayoría son directos: el remitente tiene una duda acerca de un aspecto específico de la tecnología SETI. Por ejemplo: ¿cómo podemos reconocer una señal extraterrestre? A veces un remitente tendrá una lista de preguntas que pudieran ser contestadas más rápidamente si solo tomara un curso de dos semestres ya sea en física, astronomía o radio ingeniería. Mis respuestas a tales interrogatorios no específicos son probablemente insatisfactorias, pero acostumbro responder algo amable para aquellos faltos de instrucción superior o de bajo nivel en SAT (prueba de aptitud escolar).

Ahora y de nuevo, pensadores independientes enviarán sus propios artículos de investigación – la esencia destilada de años de esfuerzo en el ático o guarida – los cuales supuestamente muestran en un puñado de páginas, y con matemáticas de tercer grado, que Einstein estaba equivocado, y que por lo tanto, SETI está, de alguna manera, ladrándole al árbol equivocado. Almaceno estos con tierno cuidado, y siempre ofrezco devolver los originales. Pero entonces de nuevo, probablemente soy demasiado blando.

Además están las personas quienes tienen una perspicacia privilegiada y desean compartirla. “Vigila las Pléyades con tus antenas”, amonestarán. Desde luego, las Pléyades abarca un conjunto estelar joven: sus estrellas miembros son cachorros, de solo algunas decenas de millones de años de edad -- apenas el tiempo suficiente para incubar vida compleja.

“El sistema Sirius”, recomiendan otros. “Después de todo los Dogon (una tribu en Mali) fueron visitados por extraterrestres quienes les hablaron de la estrella enana blanca que orbita Sirius A”. ¡Ay, que pena!, Sirius, también es una estrella joven, a lo sumo de unos cuantos cientos de millones de años de edad. Y los Dogon probablemente no fueron visitados.

Ocasionalmente, seré contactado por “espectadores remotos” quienes aparentemente tienen el poder de localizar extraterrestres usando nada más que el hardware que colocan entre sus oídos. Ellos, también, ofrecerán objetivos en el cielo (de nuevo, por lo general estrellas brillantes, a simple vista que están casi invariablemente demasiado calientes y demasiado jóvenes, para sustentar interesantes habitats de vida). Y mientras soy entusiasta para nuevas ideas, me temo que – dado el costo en tiempo y dinero para escudriñar algún sistema estelar – los objetivos necesitan más material de apoyo que una simple “visión remota”.

¿Una Mejor Física?

Otra categoría de recomendación es como hacer mejores los experimentos. ¿Porqué están perdiendo su tiempo buscando señales de luz o radio? reprochan algunos remitentes. “Las ondas de Gravedad son lo que los extraterrestres estarán usando para comunicarse, pues las ondas de gravedad son instantáneas”. Incluso dejando a un lado la considerable dificultad de detectar una onda de gravedad, e incluso la mayor dificultad en generar una (usted pudiera tener que destruir estrellas juntas para señalar radioescuchas distantes), está el hecho decepcionante de que, como sabemos hasta hoy, las ondas de gravedad viajan a la velocidad de la luz, y no más rápido.

Una variación sobre este tema, y uno que es erudito elegante, propone que sociedades avanzadas charlarán usando el ordenador cuántico, un sutil efecto que es instantáneo. Pero una cuidadosa mirada a este fenómeno, mostrará que no se libra de la condena de la velocidad de la luz. Si desea enviar información, el ordenador cuántico no es un esquema para hacerlo instantáneamente.

Al menos algunas personas brindan cada mes la queja de la “nueva física”. “Hace doscientos años, las personas se comunicaban aún por linternas destellantes y señales de humo. Esas técnicas eran indescriptiblemente sencillas. Así que, ¿que le hace pensar que las sociedades avanzadas estarían aún usando primitiva (en sus mundos) radiación electromagnética para hacer señales?” Bueno, desde luego no hay que negar que los nuevos desarrollos en la física pudieran convertirse en esquemas de comunicación de los que estamos ignorantes – esquemas que realmente hagan que la luz y el radio luzcan como formas primitivas de transmitir mensajes. El problema aquí es que es muy difícil concebir un experimento – dejando a un lado el equipo necesario – cuando no se tiene idea de los principios físicos implicados. Esto es como decirle a Cristóbal Colón que olvide las naves de madera y construya un jet.

Todavía otros tratan de ayudarnos a sintonizar nuestros receptores. Las frecuencias naturales del ADN y la clorofila se sugieren como puntos en el cuadrante a investigar (¿pero, exactamente, qué son esas frecuencias?) Otros dicen que debiéramos sintonizar nuestro equipo a la longitud de onda de las transmisiones cerebrales (cerebros presumiblemente extraterrestres). Sugerencias bien intencionadas, pero difíciles de justificar o implementar.

Sinceramente, muchas de estas sugerencias gratuitas valen la pena. Pero a veces hay ideas realmente sólidas en estas entradas de información no solicitadas, y honestamente yo trato de dar a cada bite de correspondencia que llega el beneficio de consideración. Las mejores ideas en la ciencia a menudo llegan en trayectorias inesperadas, y eso ciertamente ha sido verídico para SETI. Así que sigan enviando esas cartas y tarjetas, amigos. Solo no esperen una educación universitaria por correo electrónico.

Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

Voces presenta al Dr. Laurance Doyle

Junio 8, 2004


El Dr. Laurance Doyle, astrofísico en el Instituto SETI, supo desde un principio que quería ser astrónomo.

“Mi padre me dio un mapa del sistema solar cuando tenía seis años”, dice. “Lo que me sorprendió fue que las estrellas eran soles. Recuerdo que mi pensamiento saltó de la Tierra y jamás volvió a la Tierra de nuevo. Fue entonces cuando supe que sería astrónomo”.

Sin embargo, no fue tan fácil para Doyle. Creciendo en una granja vaquera en Cambria, California (cerca de San Simeon, mejor conocida como el lugar del Castillo Hearst), no tenía mucho acceso a información sobre estrellas. Pero con estímulo de sus padres, y leyendo libros de ciencia de la biblioteca local, Doyle pudo mantener su pasión por la astronomía. No sorprendió entonces que haya obtenido sus grados de Licenciatura y Maestría de Ciencia en Astronomía en la Universidad del Estado en San Diego.

Armado con esos grados, tomó un trabajo en el Laboratorio de Propulsión a Chorro como ingeniero en imágenes, analizando fotografías de Júpiter y Saturno enviadas desde la sonda espacial Voyager. Entonces fue a Heidelberg, Alemania, para ayudar a analizar imágenes del Cometa Halley enviadas por la sonda espacial. Estando allí, obtuvo su doctorado en Astrofísica en la Universidad de Heidelberg, graduándose en el 601 aniversario de existencia de la universidad.

Doyle ingresó al Instituto SETI en 1987 como un investigador inicial estudiando planetas extrasolares.

La Teoría de la Información

Entre los actuales proyectos de Doyle está intentar comparar los silbidos de los delfines y el balbuceo de los bebés para hacer predicciones sobre comunicaciones extraterrestres.
La conexión puede parecer tenue, pero cree que al medir la complejidad de las comunicaciones de diferentes especies en la Tierra, pudiéramos obtener un buen indicio de que tan avanzada es una señal extraterrestre, y donde pudieran encontrarse los humanos en esa escala.

“Si podemos aprender las reglas de comunicación al entender los lenguajes de otras especies en la Tierra, estaremos mucho mejor preparados para tratar con un mensaje extraterrestre siempre y cuando llegue”, explica Doyle.

El proyecto de Comunicación Animal usa la Teoría de la Información, una formulación matemática desarrollada para cuantificar la cantidad de información enviada por las líneas de teléfono para determinar cuánta información intercambian los delfines unos a otros. Su estudio determinó que los bebés balbucean cerca de 800 sonidos diferentes con la misma cantidad de frecuencia de los balbuceos de delfín. Al ir creciendo, esos sonidos son limitados a apenas 50, haciéndose muy repetitivos, con algunos sonidos que son usados con más frecuencia que otros. Su estudio encontró que los delfines bebés se desarrollan de manera semejante con respecto a sus silbidos.

“Grabamos silbidos de delfín y dieron la misma distribución del lenguaje humano. Y eso nos sorprendió”, dice Doyle. Eso da la “prueba matemática de que los silbidos de delfín no son fortuitos”.

Claude Shannon, científico del Laboratorio Bell quien fue la primera en poner en práctica la Teoría de la Información, determinó que hay reglas que gobiernan el idioma Inglés. Por ejemplo, Shannon generó letras al azar, diciéndole la computadora que la letra E es más común; la T está en segundo lugar; la A en tercero, etc. La computadora pudo generar letras con las consonantes y vocales correctas con la frecuencia de evento correcta. Entonces Shannon le dió a la computadora las reglas para generar letras que se asociaran en pares y tríos, para lo cual la computadora generó el texto correcto en Inglés.

“Lo que estamos intentando hacer con los delfines, ballenas jorobadas y otras especies es intentar trabajar en la otra dirección”, explica Doyle. “Tenemos un volumen significativo de texto y queremos ver si hay algunas reglas que podamos sacar. Empezamos a observar las relaciones entre estas señales y ver qué tan complejas se vuelven”.

Eventualmente, Doyle quisiera hacer un gráfico de la complejidad de la comunicación de varias especies, incluyendo las plantas, monos ardilla, delfines, ballenas jorobadas, y humanos.

“Lo que si conseguimos una señal extraterrestre que no sea en el 9° lugar sino el 20° en orden de complejidad”, supone Doyle. “enseguida, sabemos que su capacidad de comunicación excede la nuestra por aproximadamente tanto como la nuestra excede la de las ardillas de campo. En otras palabras, vamos a saber enseguida en donde nos encontramos. Incluso alguna transmisión extraterrestre tendría que obedecer las reglas de la teoría de la información”.

Detección de Planetas Extrasolares vía Fotometría

Otro de los actuales proyectos de Doyle es la detección de planetas extrasolares utilizando la fotometría. Doyle usa la fotometría en tres formas distintas para medir la variación en la luminosidad de las estrellas. El Método del Tránsito Fotométrico usa un algoritmo para ver la sombra de un planeta mientras atraviesa el disco de una estrella. El algoritmo es una manera matemática de cuantificar si realmente es un tránsito o una oscilación en la atmósfera.

Otro método, el Método de Reflexión de Fase usa la variación sinusoidal (similar a la órbita de la luna de nueva a llena) para detectar planetas gigantes mientras atraviesan fases de órbita cerca a sus estrellas. Binarias eclipsantes es el tercer método de detección de planetas para estrellas que vienen en pares y se eclipsan una frente a la otra regularmente. Al cronometrar los eclipses, los astrónomos pueden determinar si hay un planeta cercano, contrarrestando esos eclipses.

PlanetQuest

PlanetQuest es tal vez el proyecto en el que Doyle está más apasionado. Es de naturaleza educacional y permite a cualquiera participar en la búsqueda de planetas extrasolares.

“Veo esto como convertir a cualquiera en astrónomos”, exclama Doyle. “No es solo leer al respecto. Y no es solo apoyar algo. Es convertir a la gente en exploradores. Es convertirlos en astrónomos de buena fe con la oportunidad de descubrir algo, y pronto”.

El software PlanetQuest permite a los astrónomos aficionados descargar imágenes de regiones de alta densidad estelar. La estrella asignada sería rastreada usando los ciclos de reserva del CPU de las computadoras.

“La idea básica es que tomen una estrella y sus computadoras midan la luminosidad de la estrella y la compare con las variaciones de luminosidad que son típicas de los distintas clases de estrellas variables”, dice Doyle.

El programa está conectado al sitio de internet de PlanetQuest el cual proporciona una referencia para el usuario de que él o ella está descubriendo. Hay también un sistema de catalogado que permitirá a los usuarios ser acreditados con cualquier descubrimiento.

Mientras solo una en 3,000 a 5,000 estrellas tendrá planetas cruzándola: todas las estrellas estarán haciendo algo, exclama Doyle. “A veces solo están allí como el Sol y crean una agradable y estable zona habitable”, dice. “A veces pulsan y son interesantes como indicadores a distancia o para estudiar la estabilidad o evolución estelar”.

Doyle cree que la participación en la búsqueda del universo es una gran manera de que las personas pongan las diferencias a un lado mientras buscan algo relevante para alguien, en el planeta.

“Necesitamos conectarnos”, dice. “El universo es enorme ahora. Realmente siento que necesitamos algo que nos una y nos conecte juntos. Pienso que una búsqueda mundial de mundos girando alrededor de otras estrellas, tiene una posibilidad de ayudar a unificar a las personas”.

Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

domingo, 8 de agosto de 2004

CNN Presenta ¿Hay Alguien Allí Afuera?

Agosto 4, 2004

La Búsqueda de Vida en el Universo




El nuevo especial de CNN Presenta, “¿Hay Alguien Allí Afuera? La Búsqueda de Vida en el Universo” explora en las preguntas que ocupan a muchos de nosotros en nuestras investigaciones. El Corresponsal de CNN Espacio Miles O´Brien mira la interrogante alienígena desde un punto de vista científico y busca las opiniones de exploradores terrestres, incluyendo a la Dra. Jill Tarter, el Dr. Chris Chyba y el Dr. Frank Drake del Instituto SETI. Los científicos del Instituto SETI fueron videograbados en el Observatorio de Arecibo, en la isla de Puerto Rico durante la última observación realizada para el Proyecto Phoenix del Instituto SETI. “Hay Alguien Allí Afuera” de CNN Presenta se transmite este Domingo 8 de Agosto a las 8 p.m. y 11 p.m. (Tiempo del Este de los Estados Unidos) por CNN/US.

Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

domingo, 18 de julio de 2004

Jill Tarter entre los 100 de la Revista TIME

Abril 19, 2004




La lista de los 100 de la revista TIME reconoce a la elite del mundo en negocios, arte, política, ciencia y otros campos, hombres y mujeres que han triunfado gracias a una combinación de inteligencia, trabajo duro y buena suerte.

”Jill es esa notable persona de la que le cuentas a tus hijos y nietos cuando has tenido el honor de trabajar con ella”.
~David R. Deboer

Todos los que la conocen coincidirían en que la científica Jill Tarter del Instituto SETI tiene una rara cualidad a menudo descrita como “presencia”. Ella ha sido una fuerza impulsora detrás de muchas facetas del Instituto SETI – sus proyectos de SETI y educación, su crecimiento, su dirección – y ha sido a menudo una representante altamente visible de la organización en el país y en el extranjero. Su influencia es extensa, y está construyendo un legado que incluirá un radio telescopio de clase mundial que cambiará la forma en que estos instrumentos se construyen, y una generación de mujeres científicas para quienes ella ha sido un modelo a seguir. Es por eso que la revista TIME seleccionó a Jill Tarter como una de sus 100 personas sobresalientes en el poder e influencia para el año 2004.

La Dra. Tarter ha tocado las vidas de muchas personas en distintas formas. Ha reunido mucho del talento científico que actualmente distingue al Instituto SETI, y varios científicos acreditan a la notoria científica del Instituto SETI para sus trayectorias académicas y de carrera profesional. Aquellos que trabajan junto a Jill están siempre impresionados por su energía, determinación y humanidad.

“He tenido la buena fortuna de trabajar como asistente de Jill Tarter por casi 15 años”, comenta Chris Neller, asistente administrativo ejecutivo de Tarter. “Durante ese tiempo he crecido para conocer y apreciar a Jill por la verdaderamente extraordinaria persona que ella es. Jill es una científica brillante, conferencista y autora. También es instruida, divertida y amable. Jill tiene una tremenda energía y enfoque; estas cualidades le permiten triunfar en muchas áreas. Ha sido y seguirá siendo retador, entretenido y más que nada, nunca aburrido trabajar con Jill”.


Fuente: Instituto SETI

Traducción: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

martes, 22 de junio de 2004

Ingredientes primordiales para la vida detectados en zonas de construcción planetaria

Mayo 28, 2004


Concepto artístico mostrando un posible planeta recién descubierto girando a través de un claro cerca del polvoriento disco formador de planetas de una estrella.
Enlaces relacionados:
*
Detalle de imagen/información
*Imágenes y animación relacionadas
*
Difusión en vivo: actualizaciones de ciencia espacial
*Spitzer – Página Web


La NASA ha anunciado nuevos hallazgos del Telescopio Espacial Spitzer, incluyendo el descubrimiento de cantidades importantes de materiales orgánicos helados esparcidos a través de varias “zonas de construcción planetarias” o discos polvorientos formadores de planetas, que circundan estrellas nacientes.

Estos materiales, partículas de polvo heladas cubiertas con agua, metanol y dióxido de carbono, pueden ayudar a explicar el origen de planetoides congelados como los cometas. Los científicos creen que estos cometas pueden haber dotado a la Tierra con algo de su agua y mucho de su biogénica, materiales capaces de permitir la vida.


Los doctores Dan Watson y William Forrest de la Universidad de Rochester, N.Y., identificaron los hielos. Ellos investigaron cinco estrellas muy jóvenes en la constelación de Tauro, distante 420 años luz de la Tierra. Estudios preliminares habían identificado en el espacio, materiales orgánicos similares, pero esta es la primera vez que han sido vistos sin lugar a dudas en el polvo que cubre los discos formadores de planetas.



Concepto artístico de partículas de polvo heladas. Una animación relacionada enfoca un disco formador de planeta alrededor de una estrella naciente para revelar las partículas de polvo que cubren el disco. El Telescopio Espacial Spitzer detectó en estas partículas de polvo los ingredientes primordiales para planetas y finalmente la vida.
Animación:
RealVideo o QuickTime



En otro hallazgo , el Spitzer investigó un grupo de estrellas jóvenes y encontró evidencia intrigante de que una de ellas puede tener el planeta más joven detectado. El observatorio encontró un claro en el disco alrededor de la estrella CoKu Tau 4. Esto puede indicar que un planeta orbitante se llevó el material del disco, así como una aspiradora deja un sendero despejado en una alfombra sucia. Los nuevos descubrimientos revelan la estructura de la abertura más claramente que nunca. Tomando en cuenta que CoKu Tau 4 tiene cerca de un millón de años, el posible planeta podría ser incluso más joven. Como comparación, la Tierra tiene una edad aproximada de 4 mil quinientos millones de años.

“Estos primeros resultados muestran que Spitzer expandirá dramáticamente nuestro entendimiento de cómo se forman las estrellas y los planetas, lo cual finalmente nos ayudará a entender nuestros orígenes”, dijo el Dr. Michael Werner, científico del proyecto Spitzer en el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadera, California, quien está a cargo de la misión.

El Spitzer también descubrió dos de los más lejanos y borrosos discos formadores de planetas jamás observados. Estos discos rodean dos o más de 300 estrellas recién nacidas reveladas por primera vez en una llamativa imagen nueva del polvoriento criadero estelar llamado RCW 49. Se encuentra aproximadamente a 13,700 años luz de la Tierra en la constelación Centauro.

“Datos preliminares sugieren que todas las 300 o más estrellas albergan discos, pero hasta ahora solo se han observado detenidamente a dos de ellas. Se encontró que ambas tienen discos”, dijo el Dr. Ed Churchwell de la Universidad de Wisconsin, Madison, Wis., principal investigador del estudio de la RCW 49, conjuntamente con la Dra. Bárbara Whitney del Instituto de Ciencia Espacial en Boulder, Col.

Los discos formadores de planetas o discos “protoplanetarios” son una fase natural en la vida de una estrella. Una estrella nace en una densa envoltura de polvo y gas. Dentro de esta envoltura y rodeando a la estrella, se encuentra un polvoriento y plano disco donde nacen los planetas.

“Mirando lo que se encuentra detrás del polvo, el Spitzer nos ha mostrado que la formación de estrellas y planetas es un proceso muy activo en nuestra galaxia”, dijo Churchwell.

El exquisitamente sensible sistema de ojos infrarrojos del Spitzer puede ver los discos formadores de planetas con gran detalle. Anteriormente, los científicos podían estudiar una pequeña muestra de discos, pero el Spitzer ya está en camino de poder analizar miles de estos discos”, dijo Werner.

El instrumental del espectrógrafo del Spitzer, que separa la luz infrarroja para mirar las trazas de varios químicos, fue usado para observar los hielos orgánicos y el claro dentro del disco de CoKu Tau 4. El conjunto de cámaras infrarrojas del Spitzer hallaron las estrellas nuevas del RCW 49. Documentos sobre la investigación aparecerán el 2 de septiembre en el Diario de Suplementos Astrofísicos. Para imágenes e información sobre la investigación en Internet, visite: http://www.spitzer.caltech.edu/ y http://photojournal.jpl.nasa.gov/ .

JPL dirige la misión del Telescopio Espacial Spitzer para la Oficina de Ciencia Espacial de la NASA en Washington. Operaciones científicas se llevan a cabo en el Centro de Ciencia Spitzer en el Instituto de Tecnología de California ubicado en Pasadera, California. JPL es una división de Caltech. El espectrógrafo infrarrojo del Spitzer fue construído por la Universidad Cornell en Ithaca, N.Y., y la Corporación Aeroespacial Ball, en Boulder, Col. El desarrollo de los instrumentos fue dirigido por el Dr. Jim Houck de Cornell. El conjunto de cámaras infrarrojas del Spitzer fue construído por el Centro de Vuelos Espaciales Goddard de la NASA, en Greenbelt, Md. El desarrollo de cámaras fue dirigido por el Dr. Giovanni Fazio del Observatorio Astrofísico Smithsoniano, en Cambridge, Mass.

Fuente: NAI (Instituto de Astrobiología de la NASA)

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...

domingo, 23 de mayo de 2004

Entrevista con el Hermano Guy Consolmagno

Curador de Meteoritos en el Observatorio Vaticano


Resumen: Mayo 12, 2004.- En la Conferencia 2004 sobre la Ciencia de la Astrobiología, el Dr. Guy Consolmagno astrónomo del Vaticano habló sobre su investigación como conservador de una de las colecciones de meteoritos más grandes del mundo.





por Henry Bortman

El Dr. Guy Consolmagno divide su tiempo entre Tucson, Arizona, donde observa asteroides y cometas del Cinturón de Kuiper con el telescopio de 1.8 metros del Vaticano en Monte Graham, y Castelgandolfo, Italia, hogar de los meteoritos del Vaticano. El Observatorio Vaticano estableció una rama de investigación en Arizona en 1981 cuando la creciente población de Roma hizo el cielo muy brillante para observaciones astronómicas.



Las observaciones del cielo nocturno compiten con las luces urbanas y de la calle
Imagen: darksky.org



Consolmagno es escritor, astrónomo del Vaticano y conservador de la colección de meteoritos del Vaticano. Su investigación explora las conecciones entre los meteoritos y los asteroides, y el origen y la evolución de las pequeñas masas en el sistema solar.


Su trabajo en los estudios de asteroides y meteoritos inspiró a la Unión Astronómica Internacional para bautizar un asteroide, el 4597 Consolmagno, en su honor en el 2000. El Dr. Consolmagno obtuvo su licenciatura en ciencia en 1974 y maestría de ciencia en 1975 en Ciencias Planetarias y de la Tierra del Instituto de Tecnología de Massachusetts, y su Doctorado en Ciencia Planetaria en la Universidad de Arizona en 1978. De 1978 a 1980 fue un compañero de postdoctorado y conferencista en el Observatorio de la Universidad de Harvard, y de 1980 a 1983 continuó como Posdoctor y conferencista en el ITM. También ha pasado varios periodos como científico visitante en el Centro de Vuelo Espacial Goddard de la NASA y como profesor visitante en el Colegio de Loyola, en Baltimore, y en la Universidad de Loyola, en Chicago.

El director de edición de Astrobiology Magazine, Henry Bortman, tuvo la oportunidad de hablar con el Dr. Consolmagno en la Conferencia sobre la Ciencia de la Astrobiología, en el Centro de Investigación AMES, en Mountain View, California.

--------------------------------------------------------------------------------


Astrobiology Magazine (AM): Debo confesar –sin mala intención – que no sabía que el Vaticano tuviera un conservador de meteoritos. ¿Puede describir que es lo que usted hace?



Observatorio Vaticano, en Castelgandolfo. La biblioteca en Castelgandolfo contiene más de 22,000 volúmenes y posee una valiosa colección de raros libros antiguos incluyendo trabajos de Copérnico, Galileo, Newton, Kepler, Brahe, Clavio y Secchi.
Imagen: Universidad de Arizona/Observatorio Vaticano



Guy Consolmagno: Hago estudios a meteoritos. También soy científico planetario, y estoy interesado en el origen y la evolución de los planetas, especialmente los cuerpos pequeños. He estado trabajando en todo desde las lunas heladas de Júpiter, a los orígenes de la luna, hasta observaciones de objetos del Cinturón de Kuiper.

AM: ¿Y cómo llegó a trabajar para el Vaticano?

GC: Es una larga historia. Había sido astrónomo durante 15 años antes que decidiera ingresar con los Jesuitas. Hice mi trabajo estudiantil en el ITM y mi doctorado en Arizona. Y en un punto me pregunté porqué estaba perdiendo mi tiempo haciendo astronomía cuando la gente se moría de hambre en el mundo – una vocecita de conciencia.

Así que me uní a los Cuerpos de Paz. Mientras estuve allí, descubrí que me gustaba la docencia. Pero sobre todo descubrí que la gente en África, la gente en Kenia, donde yo estaba, deseaba saber acerca de la astronomía. Es lo que ellos querían de mí. Y ellos estaban tan fascinados y emocionados sobre eso como lo estaba yo, como cualquier persona en América.



La Tierra vista como un pequeño y pálido punto azul por la lejana sonda espacial Voyager.
Imagen: NASA



Y entonces entendí porqué es importante. Es una de esas cosas que nos convierte en más que solo vacas bien alimentadas. Satisface un hambre realmente profunda por saber, por ir a algún lugar, por explorar. Y esa es un hambre que es tan humana, tan básica para los seres humanos como la comida y el refugio y cualquier otra cosa. Y es negada a una persona solo a costa de negarles su humanidad. Diciéndole a la gente pobre, “no, no, tienes que ir a cazar alimento, no puedes hacer astronomía”, usted está diciendo que son menos que humanos. Y eso está mal. Y es una tragedia.

AM: Usted ve el estudio de la astronomía como una búsqueda espiritual?

GC: Absolutamente. Cuando regresé de los Cuerpos de Paz, dí clases por cuatro años, y lo gocé tanto que decidí enseñar a tiempo completo. Y así que ingresé a una orden de enseñanza, los Jesuitas. De lo que no me di cuenta fue que me sacaban de la enseñanza para hacer investigación de tiempo completo en el Vaticano. Soy uno de ellos. Venimos de todo el mundo. Todos hacemos solamente astronomía a tiempo completo. Pero además, doy muchas pláticas públicas y cosas como mi participación en esta conferencia.

Y la razón por la cual la Iglesia apoya la astronomía –

AM: Esa era mi siguiente pregunta.

GC: regresa, en el sentido de que se remonta a la reforma del calendario, por 1582. Ellos contrataron un astrónomo para resolver como hacer el trabajo del calendario correctamente. También existe un sentido de que la Iglesia, en los tiempos modernos, desea mostrar al mundo que no tiene miedo de la ciencia, que apoya a la ciencia, que piensa que la ciencia es una cosa maravillosa. No solo para dar confianza a los científicos, sino también para darle la confianza a la gente religiosa de que la ciencia es algo bueno. No escuchen a las personas que digan que debe elegir entre lo uno y lo otro.



El Telescopio de Tecnología Avanzada del Vaticano (VATT)
Imagen: VATT/Arizona




Y suceden dos cosas. Una es la percepción de que, si Dios hizo el universo, y lo hizo prosperar, y amó tanto al universo que, como creemos los cristianos, envió a su único hijo, nos corresponde honrar y respetar y llegar a conocer el universo. Creo que fue Francis Bacon quien dijo que Dios construyó el universo como un maravilloso rompecabezas para que llegáramos a conocerlo al comprender como hizo las cosas. Al ver como las creó Dios, obtenemos una pequeña percepción de la personalidad de Dios. Y eso significa, entre otras cosas no adentrarnos en ideas preconcebidas. No podemos imponer nuestra idea de cómo hizo Dios las cosas. Nos corresponde ver como el universo funciona realmente.

AM: ¿No es una idea preconcebida la creencia de que Dios creó al universo?

GC:Lo es. Y es una idea preconcebida que de alguna u otra forma cada científico ha de tener. Porque aquí está el otro aspecto: para ser un científico debe tener dos suposiciones fundamentales, tan fundamentales que usted ni siquiera piensa en eso. Usted supone que el universo es razonable, que en realidad hay un objetivo real; que hay una lógica para esto; que no es solo caos, que se basa en leyes. Estamos tan acostumbrados a esa suposición, que no se da cuenta de ella. Muchas culturas no tienen eso.

Y la otra conjetura que debe hacer es que vale la pena hacerlo. Si su idea, si su religión es meditar y elevarse por encima del universo físico, este universo físico corrupto, puede usted decir, no va a ser científico, no va a estar interesado en Marte. Así que es una declaración religiosa decir que vale la pena dedicar mi vida al universo físico. El ver como funciona el universo bien vale la pena pasar toda una vida haciéndolo.



Imagen a color real de la galaxia espiral UGC12343, tomada como parte de un gran examen en el cercano-ultravioleta de galaxias locales. Presentada en Noviembre de 1996 al Papa Juan Pablo II en una conferencia sobre la formación de la galaxia.
Imagen: Windhorst, et al



AM: ¿Porqué es una declaración religiosa?

GC: Por religiosa quiero decir que está basada en ciertas suposiciones fundamentales que tiene sobre como funciona el universo y cual es su lugar en el universo. Y finalmente, eso es una suposición religiosa. Si es mi religión o la religión de alguien más, mucha gente con muchas religiones están viendo a la ciencia. No estoy diciendo que solo es una religión la que tiene esa suposición. Sino que estoy diciendo que hay religiones que no la tienen. Hay brillantes culturas a través de la historia quienes han tenido matemáticos fabulosos y sistemas éticos gloriosos – y nada de ciencia. Es realmente una importante suposición fundamental que usted tiene que tener, especialmente día a día como científico. Es lo que te levanta en la mañana.

Usted sabe, uno de las cosas temibles como científico es que no tiene que estar golpeando un reloj. Probablemente no hay nadie mirando sobre su hombro para ver si usted está trabajando hoy. Es solo después de dos años, cuando usted no ha producido nada, que usted no consigue la siguiente concesión y entonces está fuera del empleo. Pero día tras día, ¿qué lo levanta? ¿qué lo hace hacer el trabajo? ¿porqué está usted emocionado por estas cosas? Y ¿porqué piensa que vale la pena hacerlo, cuando hay gente hambrienta en el mundo?

AM: ¿Y cuál es su respuesta?

GC: Mi respuesta es la que di antes. Que es una de las cosas que nos hacen humanos y, para mí, es una de las cosas que me llevan a toque personal cercano a Dios.

AM: Usted está en una conferencia de astrobiología, y la meta de la astrobiología es entender el origen de la vida sobre la Tierra y buscar vida en alguna otra parte, incluyendo otra vida inteligente. Así que vamos por el gran premio. Suponga que otra especie inteligente sea descubierta. ¿Qué haría eso a las creencias de la Iglesia acerca que Dios creó el universo, y la Tierra, y las criaturas sobre la Tierra, y que envió a su único hijo – lo cual es lo que dice en el libro – a este planeta, donde hay especies inteligentes, quizás uno entre millones?

GC: Hay cinco suposiciones allí. Así que, “no lo sé”, “no lo sé” y “¿como diablos podría saberlo?” Pero, también soy fanático de la ciencia ficción –

AM: ¿Ha leído “El Gorrión”?

GC: Si, y lo odio. Pero ese es un ejemplar completamente distinto. Nadie en ese libro tiene sentido del humor. Nadie en ese libro sabía como reír.
Pero aquí hay tres escenarios. El primero más probable: Encontramos una civilización inteligente y no hay forma en la creación de que podamos comunicarnos con ellos porque ellos son tan extraños para nosotros. No podemos hablar con los delfines en la actualidad. En cualquier caso, nunca lo sabremos.



El número de estrellas en el universo visible se estima sea diez veces más que el número de granos de arena sobre la Tierra y once veces el número de tazas de agua en todos los océanos de la Tierra – o 7 mil trillones o 7000,000,000,000,000,000,000 (siete seguido por 21 ceros).
Imagen: NASA/STScI/ESA




Segundo escenario: Encontramos la civilización inteligente. Podemos comunicarnos. Descubrimos que ellos tienen dos esencias del alma humana de las que hablan los teólogos, inteligencia y libre voluntad. Saben quienes son, están conscientes de sí mismos, y son capaces de hacer algo al respecto. Pienso que los perros tienen conciencia de sí mismos, pero no tienen mucho de libre voluntad. Tal vez las computadoras son algo por el estilo. Los seres humanos deben tener ambas.

Eso significa que si usted va a tener libertad, debe ser capaz de hacer lo correcto y lo incorrecto. Hay maldad en el mundo, eso es un hecho observado. Hay la necesidad de derrotar la maldad en el mundo. Hay la necesidad de salvación de lo que tenemos. No puedo imaginar que ellos no lo necesiten, si tienen la misma libertad que nosotros tenemos.

Si usted desea intercambiar buenas citas bíblicas, aquí está una: El comienzo del Evangelio de Juan, “En el principio era el Verbo”. El Verbo es, desde luego, Jesús, el Verbo es la segunda persona de la Trinidad, el Verbo es la salvación, el Verbo es la encarnación de Dios en el universo, quien de acuerdo con el Evangelio está ahí desde antes que el universo fuera hecho. El punto en el tiempo-espacio que es el mismo en cada Línea de Tiempo. Así la salvación ocurre y se hace manifiesta aquí en la persona de Jesucristo.

¿Es posible que haya otros Verbos en otros idiomas para otras culturas? Eso me supera. Pero es el escenario número dos. Y la gente ha hablado de eso por cientos de años, la idea de que pudiera haber otras vidas – es poesía clásica Católica. Y eso es lo que es, es poesía, no teología. Porque es muy hipotético.

Un tercer escenario: Encontramos una docena de civilizaciones ahí afuera, y un grupo de testigos de Jehová va y los convierte a todos. Al final del día, cada civilización es Cristiana, excepto la raza humana que aún no está muy segura de eso. Digo, todo es posible.

AM: Pero dejó uno por fuera: Que ellos nos conviertan. Porque como sabemos que ellos no tienen un conjunto de creencias igualmente poderosas –

GC: No parece que las creencias lleguen unidas al poder. Ni siquiera podemos convertirnos nosotros mismos.

AM: Muy bien, olvide “poderosas”. Un conjunto de creencias de “profundo sentido”.

GC: Bueno, la única correlación que tenemos es la manera en que han interactuado las distintas civilizaciones sobre la faz de la Tierra al entrar en contacto.

AM: El registro de la Iglesia no es muy bueno en ese aspecto –

GC: Oh, es mucho mejor de lo que usted piensa. Es mucho mejor de lo que usted piensa. No se crea de anticlericales personas iluminadas quienes estuvieron propagando todo tipo de mentiras para cubrir su propio trasero. Es la Iglesia quien estuvo protegiendo a la gente indígena en Sudamérica, contra los militares.

AM: No creo que los estuviera protegiendo en California.

GC: Bien, lea su historia. ¿Estoy diciendo que lo hicieron todo a la perfección? No. Con certeza lo hicieron en Paraguay.

El punto es, si usted va a convertir a alguien, usted debe tratarlos como iguales. Hay gente, cuando vinieron a las Américas, que pensaron que, bueno, podemos esclavizar a esta gente porque ellos no tienen almas. Y la Iglesia dijo: “Usted no puede hacer eso”. Si usted envía un misionario a alguien, implícitamente está diciendo que son iguales.

La otra cosa que sucede es que cada parte aprende de la otra, inevitablemente. Y se enciende continuamente el sentido de culturización. Eso pasó cuando los misioneros de Italia enseñaron en Irlanda. Las sensibilidades irlandesas se convirtieron en parte del entorno cristiano. Las sensibilidades alemanas. Las sensibilidades rusas. Cada cultura ha añadido algo a la mezcla, y resaltar algo de la mezcla. Es inevitable. Usted no puede pretender que es una calle de un solo sentido. Aún cuando usted quisiera que lo fuera, no sería.

AM: Cambiemos un poco de tema. ¿En qué se enfoca su investigación de meteoritos?

GC: Mi interés particular es realmente el tejido físico del meteorito. Nuestra comprensión del origen del sistema solar involucra la nebulosa solar, la condensación de, esencialmente, mucho polvo. Y podemos representar como usted va desde minúsculos granos de polvo a quizás bolas de polvo de kilómetros de tamaño. Pero eso no es lo que vemos en nuestros museos. Lo que vemos son rocas. Rocas bien constituidas, bien comprimidas. ¿Cuándo y dónde sucedió eso? ¿Cómo sucedió eso?

Así que hemos vuelto y medido la porosidad actual de los meteoritos, para mirar físicamente su tejido. Individualmente, observándolos en la parte delgada y con un SEM (microscopio de electrón para exploración), solo señalamos y contabilizamos donde están las grietas. Pero también en muestras a la mano, en volumen, usamos el picnómetro de helio y otros métodos para medir las densidades. Y una de las cosas interesantes que surgieron de eso es que produjimos el primer sistema de densidades de meteoritos realmente bueno por el tiempo que estuvimos obteniendo densidades de asteroides, y observamos que ellos no concuerdan del todo. Los asteroides son un buen 20 porciento menos densos que los meteoritos, lo cual encaja con las nuevas ideas de que los asteroides no son grandes masas de roca, son montones de escombro, o por lo menos, rocas muy fracturadas. Así que eso nos dice sobre el proceso que pasaron en hace unos cuatro y medio miles de millones de años.

AM: ¿Y porqué el Vaticano financia esta investigación?

GC: Hay una razón política. Es una simple, que ellos quieren que el mundo sepa que la Iglesia no teme a la ciencia, que a ellos les gusta la ciencia, que la ciencia es grandiosa, que es nuestra forma de observar como Dios creó al universo, y desean hacer una manifestación tan fuerte como sea posible que la verdad no contradiga la verdad, que si usted tiene fe, entonces nunca va a temer de lo que la ciencia esté produciendo. Porque es verdad.

Y la vez en la historia en que ellos metieron la pata en esto, el asunto de Galileo, la Iglesia estaba equivocada. Y hemos admitido que estaba equivocada. ¿Cuántas veces la ciencia ha abusado de la Iglesia? ¿Qué tan a menudo escucha usted a los científicos disculparse con la Iglesia?

AM: ¿Piensa que fue la única vez en la historia que sucedió eso?

GC: El proyecto científico en conjunto realmente no coincide bien con la teología Cristiana. La completa idea de que el estudio del universo vale la pena es una idea Cristiana. El mecanismo entero para el estudio del universo físico surge directamente de la lógica total de la era escolástica. ¿Quién fue el primer geólogo? Alberto El Grande, quien fue un monje. ¿Quién fue el primer químico? Roger Bacon, quien era un monje. ¿Quién fue la persona que produjo la teoría del Big Bang? Georges Lemaître, quien era un sacerdote. Existe esta larga tradición; la mayoría de los científicos antes del siglo 19 eran clérigos. ¿Quién más tenía el tiempo libre y la educación para pistas y medir la posición de las estrellas?

AM: Bien, pero usted trajo a colación a Galileo, no yo. ¿Está usted diciendo que fue un incidente único, o fue un período de tiempo –

GC: Un poco de ambos.

AM: -- y si fue un periodo de tiempo, ¿cuándo piensa usted que cambió, y como y porqué piensa que cambió? Porque tomó un buen tiempo disculparse.

GC: Bueno, sí y no. Probablemente usted no esté enterado de las otras disculpas anteriores a la disculpa más reciente. Nadie sabe realmente porqué la de Galileo fue después. Usted puede leer todos los documentos. Están traducidos en un libro maravilloso de Finocchiaro, “The Galileo Affair”. La mayor parte de la vida de Galileo el fue agasajado, fue tratado como un héroe, incluso por gente de la Iglesia. Su libro, “El Investigador”, tuvo la censura de la que dice: “Estamos honrados de vivir en una época con un hombre así de maravilloso”. Cuando Galileo se metió en problemas al final de su vida, fue un verdadero choque. Fue un completo revés de todo lo que había estado diciendo hasta ese punto.

Y la pregunta histórica es ¿porqué sucedió? Y la respuesta es: no lo sabemos. Usted puede entrar a amazon.com y encontrar 300 libros sobre Galileo, cada uno de ellos con una respuesta distinta. Lo cual es para decir, que algo estaba sucediendo, y no era simplemente una cosa de ciencia contra religión que Berthold Brecht describe en su representación. Si usted se basa en “JFK”, la película, para comprender lo sucedido en el asesinato de Kennedy, estaría en buena condición. Tiene que recordar que el incidente de Galileo ocurrió a la altura de la Reforma y la Guerra de los 30 años. Estas eran épocas realmente estresantes en Europa. Europa estaba despedazándose. Y fue una mala época única para muchas personas en muchas direcciones.

¿Podría suceder de nuevo? Por supuesto que podría suceder de nuevo. Mientras haya seres humanos en la Iglesia – y la última vez que la ví, la mayoría lo era – y mientras haya seres humanos que sean científicos, inevitablemente habrá conflictos, habrá gente que piense que saben más, y habrá gente que estará en lo correcto y gente que estará equivocada. La Iglesia siempre cometerá errores. Los científicos siempre cometerán errores. Somos seres humanos.

Pero si usted mira todo el alcance de la historia, en mayor parte de su historia, la Iglesia ha pensado que estudiar la ciencia es grandioso. Y ha habido un margen de fundamentalistas religiosos – no Católicos -- quienes han tratado de tergiversar la ciencia a su peculiar teología particular. Al mismo tiempo, ha habido un grupo de fundamentalistas de ciencia, quienes han tratado de usar a la ciencia como un religión sustituta. Y realmente ninguna de esas operaciones funciona muy bien. Y pienso que ambas, resultan carentes de confianza.

Los religiosos fundamentalistas, básicamente, se asustan de no tener fe, por lo cual ellos se aferran tan firmemente a lo poco que tienen. Los fundamentalistas de la ciencia, creo que algunos de ellos solo desean ser tomados en serio como científicos y ellos piensan, bueno tengo que demostrar que he rechazado cualquier otra cosa.

Así que en ese sentido, la ciencia y la religión están muy separadas. Y Stephen Jay Gould lo ha llevado a ese punto en su libro “Roca de la Eternidad”. Pero en lo que él falló es que cada ser humano es una persona con creencias religiosas, quien también es un científico. En el nivel fundamental -- ¿Porqué hago esto? ¿Qué estoy buscando? ¿Porqué elijo estudiar esta interrogante en lugar de aquella? ¿Qué clase de imagen de Dios tengo al final del día cuando veo que el universo no es solo una bóveda sobre una Tierra plana, del modo que la describe el Génesis, sino que es un número infinito de multiversos? – lo que hace la ciencia es expandir mi visión de lo grande que es Dios. Y como dije antes, mis creencias fundamentales de cómo funciona el universo, las cuales no pueden ser probadas por la ciencia, son las suposiciones con las que comencé antes de que pueda construir un sistema lógico. Estas suposiciones dirigen que ciencia hago y porqué lo hago.

AM: ¿Qué espera obtener al estar aquí en la Conferencia sobre la Ciencia de la Astrobiología?

GC: Oh, pasar un buen rato. Y, fundamentalmente, es la razón por la que hacemos ciencia, porque es realmente divertido. También estoy trabajando en un proyecto de investigación con Lyyn Rothschild sobre si la vida puede o no ser transportada en los espacios porosos de los meteoritos. Y también queremos hablar de eso.

Además, de alguna manera, estoy ondeando la bandera de la Iglesia. Solo al pasearme con este distintivo que dice “Observatorio Vaticano, “estoy recordándole a la gente que, si, hay verdaderamente un aspecto religioso, y en efecto, un aspecto ético para la ciencia. Eso es de lo que se trata que yo esté participando aquí – que somos seres humanos, que tenemos más que solo ciencia en nuestras vidas. Y la ciencia es grandiosa y maravillosa, y cuando se hace correctamente, no se hace por dinero o por nuestro propio prestigio o nuestra propia gloria sino porque queremos descubrir cual es la verdad. Esa es la mejor manera de hacer ciencia. Es la más divertida. Una de las cosas agradables de estar contratado por el Vaticano es que no tengo que preocuparme de las políticas de la NASA. No tengo que escribir grandes propuestas. No tengo que averiguar cual es la meta de este mes. Puedo hacer todo lo que deseo.

AM: ¿No tiene que preocuparse de las políticas del Vaticano?

GC: No. Ellos apenas saben que existimos. Mis instrucciones cuando llegué allí fueron: haga buena ciencia, punto.

AM: ¿El Vaticano financia otra investigación aparte de su propia investigación? ¿Tiene una relación con la ESA (Agencia Espacial Europea), por ejemplo?

GC: No. El Vaticano es en realidad un equipo bastante pequeño, por sí mismo. El presupuesto del Vaticano es más pequeño que el presupuesto de la mayoría de las arquidiócesis en los Estados Unidos, porque no tienen todas las escuelas y los hospitales y cosas. Así que el hecho de que obtenemos el dinero que obtenemos, el cual está probablemente debajo de un millón al año, es aún un compromiso sustancial, solo para hacer ciencia. Pero somos la única cosa que ellos pueden permitirse hacer directamente.

También hay una academia pontificia de las ciencias, en la cual están 120 magníficos científicos de todas partes del mundo, de cualquier religión, de cada religión, quienes se sientan como grupo para aconsejar al Vaticano sobre cuestiones dignas de preocuparse. Por ejemplo, en los 80’s, fueron los únicos que consiguieron que el Papa hablara claro sobre el invierno nuclear y el desarme nuclear.

AM: ¿Tiene algunos comentarios finales que hacer?

GC: No. No espero convertir a nadie aquí. No espero convertir a ningún extraterrestre. Si puedo conseguir que la gente piense y puedo conseguir que la gente ría, ¿qué más necesito hacer?

--------------------------------------------------------------------------------

Las opiniones expresadas en este debate no son necesariamente las del personal de la editorial o de sus patrocinadores.

Fuente: Astrobiology Magazine

Traducido por: María Luisa Hernández Castro

Artículo completo...